El masaje o también llamado Masoterapia ha sido utilizado a lo largo del tiempo por los múltiples beneficios que ofrece. Entre el estrés y las preocupaciones por tantas responsabilidades que debemos afrontar, necesitamos dedicar tiempo para nuestra salud. Para ello, podemos aprovechar los beneficios del masaje.
En este artículo hablaremos sobre las bondades del masaje. Así, podrás incluirlo dentro de las medidas de lucha contra el estrés, impidiendo los efectos negativos que produce en nuestro cuerpo.
Beneficios del masaje
En realidad el cuerpo recibe los beneficios del masaje cuando es realizado por un especialista. Recordemos la importancia de recurrir a una persona capacitada. Esto evitará dolores y molestias posteriores a causa de usar una mala técnica. Entre los beneficios del masaje están:
● Es antiestrés. Alivia el estrés emocional.
● Descontractura y relaja los músculos, ya que aumenta la circulación de la sangre, eliminando los productos de desecho acumulados en el torrente sanguíneo.
● Reduce el ritmo cardíaco y disminuye la presión sanguínea. La persona experimenta una sensación de calma y tranquilidad.
● Disminuye los dolores, al mejorar la circulación de la sangre los nutrientes y el oxígeno llegan con más rapidez a las zonas necesitadas.
● Reduce la inflamación y mejora la cicatrización de las heridas. El contacto de la mano del especialista con nuestro cuerpo otorga confort, también regula y alivia la tensión psico-física.
● Además, otorga mayor elasticidad a la piel, ésta se vuelve tersa y suave.
● En el sistema digestivo aumentan las secreciones gástricas, mejorando problemas estomacales e intestinales.
● Por si fuera poco, también fortalece el sistema inmunológico. Al haber mejor y mayor circulación de sangre en el organismo, lo desintoxica y gracias a ello puede hacerle frente con mayor eficacia a las enfermedades
¿Qué zonas del cuerpo requieren más de los masajes?
Es necesario tener en cuenta que, al realizar el masaje, el terapeuta debe ir aumentando la presión o fuerza del masaje a medida que el paciente lo permita. Nunca se deben realizar masajes bruscos y con mucha fuerza.
Un músculo contracturado necesita tiempo para aflojarse o relajarse. Una presión desmedida puede causar luego mayor dolor e inflamación.Los lugares que generalmente requieren de los masajes son la zona del cuello, espalda y cintura. El estrés y los nervios repercuten generalmente al cuello y espalda. La cintura, por otro lado, se ve mayormente afectada por malos movimientos, o por cargar pesos inadecuados.
Un estudio realizado por la Universidad de Washington y otras instituciones reveló que la terapia de masajes reduce el dolor crónico en la espalda baja mejor que la medicina.